Emoción, nervios, ilusión, esfuerzo, trabajo y mucho mucho trabajo fue lo que se transmitió y se pudo ver desde el publico de nuestro final de curso.
Niños y niñas, de todas las edades, pusieron fin a un año de mucho trabajo y actuaron bajo la atenta mirada de sus padres, abuelos, hermanos, amigos…
Fue una tarde muy bonita, de convivencia, amistad, trabajo y mucho folklore y amor por nuestra jota aragonesa.
Muchas gracias a todos vosotros por otro año mas confiar en nosotros, en nuestro grupo.